Sostenibilidad de medios en El Salvador en riesgo por la represión
Tres editores de medios no alineados al gobierno de Nayib Bukele cuentan cómo están sobrellevando estos desafíos.
Por: Mariana Belloso
Los medios independientes en El Salvador enfrentan desafíos sin precedentes en un entorno marcado por la represión gubernamental. El gobierno de Nayib Bukele ha marginado a estos medios de la pauta estatal, además de perseguir directamente a periodistas y utilizar el software Pegasus para espiarles. Las reformas legislativas que criminalizan el periodismo, impulsadas por una Asamblea Legislativa de mayoría oficialista, empeoran aún más la situación.
El gobierno ha establecido sus propias plataformas mediáticas dedicadas a la propaganda, atrayendo a profesionales de medios tradicionales, aprovechando la crisis financiera de los medios y ofreciéndoles salarios más elevados financiados con dinero estatal. Algunos de estos medios operan como empresas privadas pero dependen de entidades públicas, sin rendir cuentas sobre el uso de los fondos asignados.
Debido a estas condiciones, hay varios periodistas en el exilio y los medios que no se han alineado a repetir la propaganda gubernamental suelen ser dejados fuera de convocatorias y espacios para entrevistas, e incluso amedrentados por los cuerpos de seguridad. En el país está vigente un régimen de excepción desde marzo de 2022, y ya se ha apresado a un periodista bajo este esquema de suspensión de derechos ciudadanos.
En este contexto, la sostenibilidad de los medios de comunicación se vuelve un reto doble. El gobierno ha redirigido a sus medios de propaganda la pauta publicitaria, además de una red de influencers y youtubers que reproducen desinformación a favor de la administración Bukele.
A todo esto se suma el temor que genera en las marcas la posibilidad de represalias por anunciarse o apoyar a medios que son atacados por el gobierno. Hora de Cierre pidió a tres editores de medios independientes salvadoreños que hablaran sobre cómo están enfrentando esta situación.
Se presentan a continuación los puntos de vista de Carlos Salamanca, gerente general de El Faro; Saúl Hernández Alfaro, director ejecutivo de FOCOS, y de Wendy Monterrosa, cofundadora y directora del periódico digital Voz Pública. El Faro es el medio de investigación más importante de El Salvador, ha sido blanco directo de los ataques de Bukele y han tenido que mudar sus operaciones a Costa Rica. FOCOS, por otra parte, es un proyecto de periodismo a profundidad en formato televisivo formado por periodistas que salieron de medios tradicionales. Voz Pública también le apuesta al periodismo de profundidad y al fact checking, desde una perspectiva crítica e independiente.
Carlos Salamanca, gerente general de El Faro.net:
Sostener un medio independiente en contextos de autoritarismo es muy complicado. A nivel mundial, desde hace al menos 5-7 años, hay un debate fuerte sobre la reinvención de los modelos de negocio en los medios, donde la publicidad ya no es, en muchos casos, la principal fuente de ingresos debido al impacto que tienen empresas como Meta o Google en la distribución de inversiones. Sumar a este contexto global el desafío de buscar inversiones de publicidad, donde se puede atacar a una marca simplemente por anunciarse en un medio independiente, lo hace aún más complicado.
Apostar por los ingresos provenientes de la audiencia a través de programas de suscripciones o membresías es un camino importante, pero para mercados como el centroamericano, es un proceso gradual. En ese sentido, se vuelve a depender de fondos de cooperación internacional, de agencias y fundaciones privadas que respaldan proyectos periodísticos de medios que no someten su línea editorial a ningún tipo de influencia. La clave en estos tiempos radica en fortalecer los canales de cooperación con diversas fuentes para reducir vulnerabilidades y, al mismo tiempo, construir a largo plazo mediante programas de membresías, crowdfunding o eventos.
El camino no es sencillo en absoluto, pero confiamos en que a largo plazo nos hará más sostenibles.
Saúl Hernández Alfaro, director ejecutivo FOCOS (focostv.com), El Salvador:
Mantener a flote un medio de comunicación que opera a través de la fuerza laboral e intelectual de muchas personas, quienes deben asegurarse un ingreso mensual y prestaciones laborales, constituye un reto central para la administración de los medios independientes. Esto se debe a que enfrenta la negativa del sector privado empresarial a invertir o considerar una plataforma de periodismo cuestionadora del poder como su canal favorito para la difusión de publicidad.
El adverso contexto de concentración de poder y persecución de las voces críticas genera un disuasivo para que el sector empresarial apueste abiertamente por iniciativas o espacios alternativos en el periodismo. Esto lleva a que la administración deba explorar vías alternas para la sustentabilidad, como desarrollar capacidades de gestión de proyectos, establecer una red de actores internacionales que respalden la prensa libre, crear iniciativas de aportaciones de las audiencias o identificar nichos de mercado donde actores estén dispuestos a publicitarse sin importar las consecuencias que el poder pueda ejercer contra ellos por su libre decisión de apoyarnos.
Por último, este desafío plantea que la administración de los medios independientes debe buscar tempranamente la separación de las funciones de coordinación editorial y coordinación administrativa y financiera. Solo al diferenciar estos esfuerzos será posible no solo consolidar y posicionar una propuesta editorial robusta y atractiva para las audiencias y potenciales clientes, sino también permitirá tener el tiempo suficiente para idear prototipos y proyectos innovadores que generen nuevos ingresos para el medio."
Wendy Monterrosa, cofundadora y directora de Voz Pública:
En primer lugar, es importante que los medios evalúen los escenarios en los que operan y sean capaces de medir las implicaciones que puede tener hacer periodismo en un contexto autoritario. Es fundamental que los medios aprendan a diversificarse y encuentren un modelo de negocio amplio que les permita obtener recursos de diversas fuentes.
Esto implica no depender únicamente de la publicidad o los proyectos de cooperación. Tanto a nivel local como internacional, hay medios que están explorando otras formas de obtener ingresos, como consultorías de comunicación, asesorías, actividades académicas, suscripciones, producciones audiovisuales, crowdfunding e incluso servicios de paquetes turísticos.
Además, las plataformas digitales brindan oportunidades para expandir las formas de obtener recursos sin que los gobiernos autoritarios puedan tomar medidas para debilitar financieramente a los medios.